Ropero para Nancy

Por fin presento el ropero que les he hecho a mis niñas.
Si lo tengo es gracias a mi estimado Oruam que me facilitó las medidas y algunos valiosos consejos para su realización. Aprovecho la ocasión para darle las gracias de nuevo y recomendaros su estupendo blog: Las Nancys de Oruam. ¡No os lo perdáis!
Volviendo al ropero, he de señalar que no es exacto al original. No me fue posible hacer los acanalados decorativos en los listones verticales. Tampoco encontré un carpintero que quisiera cortarme las piezas a la medida exacta, por lo que usé unas maderas que llevaban tiempo en casa, y que precisamente compré con el propósito de construirlo mucho antes de conocer sus dimensiones que obviamente no se ajustan a las del original.

Aquí se puede apreciar que la pieza superior sobresale un poco. Si bien me hubiese gustado más acercarme al original, ese pequeño margen permite colocar en la parte superior maletines y otros objetos con mayor comodidad que siendo más estrecho. En fin, que no me ha quedado otra que hacer de la necesidad virtud.

Como no tiene el acanalado, he pintado una linea en color azul en la base a fin de que, en la medida de lo posible no quedara tan soso.
El frontal de la zona para el calzado es un poco más ancho y más alto de lo que debería, de modo que, los zapatos se ven más bien poco. 

Mis niñas, -que son muy agradecidas y fáciles de contentar-, han recibido el ropero con los brazos abiertos. Ya tienen colgada una buena parte de su ropita de las perchas doradas que les he hecho con aluminio de manualidades.
Mi Sabine está intentando decidir que modelo se va a poner. ¿El azul...? ¿El blanco...? ¡Que dilema!

Parece que al fin se ha decidido por el blanco y nos lo muestra muy contenta, mientras Cuto la observa curioso.
¡Que presumida es mi Sabine!

¡Y que guapa también! Sus ojos grises de mirada dulce y profunda hacen un contraste maravilloso con su esplendida cabellera rubia.
Daremos a Sabine un momento de intimidad para que cambie su conjunto de noche azul celeste por ese bonito vestido que ha elegido.
¡Adios!

Mónica estrena el vestidor

Mónica ha estrenado el vestidor, y posa orgullosa con una bonita combinación-culotte de punto de seda con encajes de color crudo y lazos de satén.

Un poco despeluchada, ya que acaba de levantarse de la cama, toma del estante su gel de baño favorito y una toalla. Nada mejor que una perfumada y refrescante ducha para comenzar el día.

Ya solo falta un toque de fragancia para completar su aseo. ¡Que guapa está Mónica!

Vestidor para Nancy

El vestidor de Nancy es uno de los muebles que más me gustan, y que más he deseado tener, así que me he puesto manos a la obra y he hecho esta réplica, que si bien no es exacta, para satisfacer mi capricho es más que suficiente.
Como no tenía original del que copiar, las medidas están tomadas a ojo de buen cubero, pero creo que no me he ido mucho.
El mueble en si es bastante sencillo de hacer. Lo más complicado son los cajones, pero, por suerte encontré un par de cajoncitos sueltos en un bazar. Solo he tenido que serrar la base a uno de ellos y encolarlo encima del otro. Para rellenar los espacios que quedaron he usado una masilla blanca de la marca Quilosa que se puede lijar con facilidad y no merma ni pizca.
Curiosamente lo más costoso fue encontrar los colgadores dorados. En realidad buscaba una barrita con tres ganchos que ha sido imposible conseguir, por lo que me he tenido que conformar con esos colgadores de plástico sobredorado.
El espejo lo encargué a un cristalero y lo he pegado con cinta de doble cara.
De la pintura no estoy muy contenta, ya que en mi afán de que quedara bien le he aplicado demasiadas capas y se ve algo rayada, pero en conjunto creo que ha quedado bastante aparente. Yo al menos estoy muy contenta con él.

La butaquita-salero que os enseñé creo que complementa bastante bien este mueblecito.

Mis muchachitas se han apresurado a colocar sus artículos de aseo y su lencería, y hacen cola para mirarse en el espejo de cuerpo entero. Creo que habrá más de una discusión sobre quien se acicala la primera.

Espero que os haya gustado. No es perfecto, pero yo estoy encantada de tenerlo al fin.

Butaca descalzadora para Nancy

En realidad, lo que veis ahí es un salero de madera que encontré en un bazar. Con un poco de pintura, cuatro tapas de brick y unas pegatinas lo he convertido en una butaquita descalzadora para Nancy y compañía.
El acabado de la pintura es bastante tosco debido a que la madera es de una calidad ínfima, y las fibras se abrían al lijarla, pero, por lo que me costó el salero me doy por satisfecha.

El interior de la butaca-salero viene muy bien para guardar el pijama o cualquier otra cosa que se nos ocurra.

Es una idea muy sencilla que permite que nuestras niñas dispongan de un nuevo mueble para su dormitorio. Lo de sentarlas en él con elegancia ya es más complicado por no decir imposible jajajajj

Me despido dando la bienvenida a l@s nuev@s seguidor@s y deseando a tod@s los que me visitáis un feliz fin de semana.

El abrigo de no-visón

Hubo muchos conjuntos de Nancy que me fascinaban cuando era niña y que nunca tuve, entre ellos figuraba en lugar preponderante el Abrigo de visón. Y es raro si se piensa, pues siempre, incluso en mi más tierna infancia, he sido consciente de que esos ostentosos abrigos estaban hechos con pieles arrancadas de forma indiferente y cruel a animales inocentes con tanto derecho a vivir como yo misma. A pesar de todo me gustaba el abrigo de marras; ¿quien podría resistirse a ese blanco abriguito, suave como un peluche, y lo más importante: hecho con piel de "mentira"?
En fin, como el abrigo de falso visón no llegaba ni pidiéndolo a los Reyes por carta certificada, mi madre, harta de oírme consiguió no sé dónde un retal de peluche blanco, y con él cosí el abriguito que luce mi Elia en esta ocasión. Aprovechando los restos del retal hice el gorrito a juego; bien escaso por cierto, pero es que el peluche ya no daba para más.

Elia lleva también un bolsito apañado en casa con una bolsita de bisutería, y unas medias de red hechas con un calcetín tobillero. Los zapatos también son caseros y el resultado de mis pobres intentos de hacer calzado para muñecas.

Un saludo muy cariñoso para l@s nuev@s seguidor@s, y por supuesto también para l@s que me visitáis habitualmente.
¡Que paséis tod@s un estupendo fin de semana!